SITUACIÓN ACTUAL DE LAS TEJEDAS DE LA CUENCA DEL SIL (LEÓN-ORENSE – LUGO)
El Tejo según la normativa vigente no tiene
ningún estatus de protección en Galicia, mientras que en Castilla y León está considerada como “especie de
atención preferente” según el
Decreto 63/2007, de 14 de junio, por el que se crean el Catálogo de
Flora Protegida de Castilla y León y la figura de protección denominada
Microrreserva de Flora, en la Comunidad de Castilla y León, así mismo, el
propio Decreto exige la redacción de un Plan de Manejo de la especie. Para la
establecer un plan de manejo de la especie es necesario conocer el hábitat que
ocupa, la dinámica poblacional, sus relaciones con otras especies, competencia o
depredación; así como los posibles impactos que por parte del hombre puede
recibir; conociendo la especie y su entorno podremos ayudar en su conservación.
Así mismo está en la lista de hábitat de la Red Natura 2000 (Directiva
92/43/CEE).
En el presente trabajo se ha tratado de analizar el estado de
algunas de las tejedas situadas en el entorno de la cuenca del río Sil. En el
entorno de estudio es raro encontrar al tejo como especie dominante formando
masas mono específicas, y suele aparecer como especie acompañante de otras
especies arbóreas como el roble, el acebo, el abedul o el haya; situándose en
las cabeceras de los principales ríos de la cuenca en las montañas de las
provincias de León (Ancares, Aquilianos, Laciana y Gistredo), Orense (Peña
Trevinca) y Lugo (Caurel). Destacando los teixedos de los Municipios de
Villablino, Vega de Espinareda, Palacios del Sil, Ponferrada, Carballeda de
Valdeorras y Folgoso del Caurel; el teixedal de Casaio en Orense o los tejos de
la Devesa de la Rogueira del Caurel en Lugo.
Para llevar a cabo el trabajo se ha realizado
una recopilación de la información existente acerca de las tejedas en el área
de estudio, eligiendo las zonas más representativas y que a su vez caractericen
la problemática de esta especie en la Cuenca del río Sil. Se ha analizado el
tamaño poblacional, mediante el conteo del número de individuos de la
población. Para las caracterizaciones dendrométricas se ha tomado nota de los
siguientes parámetros: altura, estado de desarrollo, diámetro basal, exposición
y pendiente; lo cual nos ha permitido establecer la estructura de edades en
cada una de las tejedas; en el estudio se ha tenido en cuenta las semillas
existentes en el suelo, viabilidad mediante germinación y grado de depredación
que ha sido medido visualmente. Para el análisis de los datos poblaciones se ha
calculado el Índice de rejuvenecimiento (IR) propuesto por Gómez Serrano y
Mayoral en 2001.
Para completar la caracterización de cada una
de las localidades estudiadas, se han determinados otra serie de
características ecológicas como la tipología de la zona, tipo de suelo, vegetación dominante y
vegetación acompañante; esto nos permite saber en que medida la especie puede
recuperarse o la competencia con las especies características va a impedir su
extensión en el territorio. Así mismo se han evaluado los problemas que pueden
marcar un retroceso y eliminación de la especie o por el contrario, la
desaparición de impacto puede marcar una lenta pero segura regeneración de la
especie.
Salvo excepciones se encuentran pequeñas
poblaciones que han sobrevivido al sistema agrícola ganadero tradicional, en
este uso tradicional se podría incluir tanto el pastoreo, como los desbroces
para el uso agrícola o la tala o poda de algunos de los ejemplares. Debido al
abandono del medio rural las zonas de montaña, antes caracterizadas por una
orientación ganadera, han sido abandonadas y la recuperación de la vegetación,
principalmente la más sensible al herbivorismo, está siendo muy importante;
esto que para algunas comunidades vegetales, con gran biodiversidad, puede ser
un problema es una gran ventaja para el tejo que tiene ahora la oportunidad de
regenerarse. Así, se encuentra en alguna de las tejedas visitadas una
regeneración importante, con ejemplares de 10, 28 y 40 cm etc.
Otra de las perturbaciones que está presente
en estas zonas son los incendios forestales. El fuego muy frecuente en estas
zonas de montaña ha destruido grandes extensiones de vegetación de distinto
tipo, las especies más resistentes a este tipo de impacto acaban siendo
dolientes en muchas de las laderas de estos montes; así se encuentran brezales
de Erica australis o matorrales de Genista florida o Cytisus scoparius, y dentro de las especies arbóreas es el roble,
la especie rebrotadora por excelencia, la que domina en muchos lugares. El
tejo, aunque con gran capacidad de rebrote, se ve gravemente dañado por el
fuego y, así en algunos lugares se resguarda a las orillas de ríos o riachuelos
donde el fuego no llega o su intensidad es menor. En otras ocasiones se
encuentra en escarpes rocosos en los que se ha refugiado del fuego y del
ganado.
En la actualidad, esta especie milenaria,
tiene otros enemigos. La actividad minera de estas zonas, en muchos casos
bastante agresiva con el medio, caracterizada principalmente por las minas a
cielo abierto de pizarra o carbón están provocando en las tejedas daños muy
importantes y en muchos casos irreparables. La existencia de estas tejedas no
ha sido un obstáculo para el avance de la actividad minera hasta los valles y
laderas que ocupan. Peor no sólo la minería está dañando a estas poblaciones
vegetales; en muchos casos el turismo “verde” mal entendido también provoca
serios impactos. Así, en las tejedas donde la regeneración comienza a ser un
pequeño milagro y una esperanza de recuperación de la especie, la entrada de
visitantes de forma masiva puede acabar con ella.
Los tejos, por un lado centenarios y una gran
resistencia a los impactos, por otro lado son muy sensibles a algunos usos de
los más extendidos en estos parajes. Por ello es necesario un conocimiento más
exhaustivo de esta especie y un respeto mayor a su entorno.
Valbuena, L.; Fernández-Manso, A.; San Román, J.M.; Núñez, R. 2010. Jornadas Internacinales del tejo.
EL TEJO EN EL PLAN DE CONSERVACIÓN DEL
ARBOLADO MONUMENTAL DE LA COMARCA DE EL BIERZO-LEÓN.
En el mes de enero de 2006 se firma el convenio entre la Fundación
General de la Universidad de León, el Consejo Comarcal del Bierzo y la
Asociación A Morteira para la redacción del Plan de Conservación de Árboles y
Arboledas Monumentales de la Comarca de El Bierzo (PCAM-Bierzo). Este convenio
representa un hito en la conservación de los recursos naturales de la comarca.
El documento firmado expresa como para las tres entidades se considera de
especial interés la mutua colaboración en orden a la promoción de esta temática
desde diferentes enfoques científico, cultural, de planeamiento y promoción de
los recursos forestales y medioambientales en la comarca de El Bierzo.
El PCAM-Bierzo expresamente se ha centrado en los árboles monumentales
del entorno humanizado, excluyendo los árboles de bosques naturales. Se ha
inventariado y catalogado 52 tejos singulares pertenecientes a 31 entidades
locales de 16 municipios. Se ha encontrado que existe una importante
vinculación espacial entre los árboles estudiados y las tejedas silvestre de la
comarca.
Estos ejemplares botánicos, entre los que destacan el tejo de San
Cristóbal de Valdueza y los teixos de Villarrubín, presentan características
excepcionales de tipo científico, histórico, cultural y social lo que les
confiere un importante valor
patrimonial. El conjunto de tejos
inventariados constituyen un patrimonio arbóreo único que forma parte del
patrimonio medio ambiental y cultural de la comarca, lo que implica que sea de
interés público su protección y conservación.
A pesar de este demostrado interés han sido escasas, cuando no
inexistentes, las medidas adoptadas para su conservación. El conocimiento,
caracterización y evaluación de su estado de conservación, cuyos resultados se
presentan en este estudio, servirán para definir, programar y ejecutar las
actuaciones que aseguren su pervivencia futura.
A. Fernandez-Manso1, C. Martínez2, T. Nespral2, O. Francés3, L. Suárez3.
1. Universidad de León
2. Asociación A Morteira,
3. Consejo Comarcal del Bierzo. España